Boca le ganaba 2-0 a Newell's y todo era alegría, pero se vivió un momento de algo de tensión en la Bombonera, cuando un error defensivo le dio una nueva vida al rival y llenó de dudas al local.
A menos de un minuto del segundo tanto de Wanchope Ábila, Santiago Vergini regaló una pelota en salida y costó carísimo: en tres toques, la visita se metió en el área de Agustín Rossi y Héctor Fértoli consiguió el descuento.
Y Guillermo Barros Schelotto estalló: empezó a insultar al aire, sin importarle que las cámaras de televisión lo estaban siguiendo.
Por fortuna para Vergini, Guillermo y todo los fanáticos de Boca, en el complemento Cristian Pavón sentenció el 3-1 y dejó a Boca a un paso de un nuevo título local. Hasta podría consagrarse el próxima fin de semana, en el caso que le gane a Gimnasia y Godoy Cruz no pueda sumar de a tres.
