En la última jornada del juicio oral al médico Larry Nassar, acusado de abusar sexualmente de deportistas -parte de ellas gimnastas olímpicas- cuando eran menores de edad, el acusado pidió disculpas. "Es poco comparado con el dolor, trauma y destrucción emocional. Lo recordaré el resto de mis días", aseguró compungido en el estrado acompañado por su abogado defensor..
La fiscal del caso Angela Povilaitis se extendió en su alegato, una verdadera lección sobre los predadores sexuales, sus conductas y la reacción social. Señaló que Nassar, de 54 años, comenzó con los abusos incluso antes de recibirse de médico. "Penetró con su mano las vaginas de sus víctimas para su placer sexual, tuvo erecciones. Incluso les preguntó a chicas de 11 años si habían tenido el período para saber si estaban maduras para ser abusadas", relató.
Argumentó que Nassar utilizó su prestigio para explotar a las chicas y destruirlas emocionalmente. "Fueron usadas por un hombre en el que confiaban y al que amaban", sostuvo. Y agregó que el acusado manipulaba a los padres de sus pacientes, y trató de hacer lo mismo con la policía.
Además, acusó a la entidad gubernamental USA Gimnastics: "Ocultaron el dolor, las heridas, los cuerpos permanentemente lastimados".
"Nassar fue un monstruo. Adornaba su consultorio con las fotos de sus pacientes, las atletas olímpicas. Hizo sentir especiales a sus víctimas. Era un confidente, un modelo, un hombre influyente en sus vidas. Conocía a sus padres, algunos de ellos también médicos, otros policías. Creía que no iba a tener que rendir cuentas, que era intocable", explicó.
A algunas de sus pacientes no solo les robó su inocencia, sino su buena salud, a causa de malos diagnósticos y tratamientos inadecuados. Povilaitis dijo conmovida que Nassar, especialista en osteopatía, les dejó a sus víctimas "rastros indelebles" mientras "tenía acceso continuo a sus jóvenes cuerpos".
Algunas de las chicas abusadas demoraron 20 años en hablar. "Las llamaron mentirosas. Hay gente todavía en esta comunidad que dice que lo hacen por dinero o atención. ¿Están bromeando? ¿Como puede alguien pensar eso? Espero que hayan aprendido la lección ", lamentó la fiscal.
Por otra parte, destacó el rol de los periodistas de investigación del diario Indystar, que con un informe sobre la negligencia de la organización USA Gimnastics ante las evidencias de abuso estimuló la presentación de la primera denuncia contra Nassar. "La justicia no lo detuvo. Fueron los reporteros los que publicaron la historia y lo trajeron aquí", reconoció.
Las acusaciones falsas en casos de abuso sexual son escasas: "Los chicos no denuncian, especialmente cuando son de corta edad y no tienen experiencia sexual. Les enseñamos a respetar a los adultos, a guardar silencio, cuando deberíamos decirles que alcen la voz".
"Nuestro equipo está orgulloso de las víctimas", concluyó, y agradeció el coraje de las más de 150 mujeres que declararon.
La jueza Rosemarie Aquilino, después de hablar largamente sobre los padecimientos de las abusadas y la gravedad del flagelo del abuso sexual de menores se dirigió al acusado y le preguntó si se declaraba culpable. "Usted es un peligro", sentenció.
Después de escuchar la condena a 175 años, la sala se puso de pie y aplaudió largamente. Los fiscales se abrazaron emocionadas con las atletas y sus familiares.
