Todo estaba listo. River ya tenía su primer refuerzo para un 2018 en el que tendrá como gran objetivo pelear la Copa Libertadores y defender el bicampeonato de la Copa Argentina, entre otras cosas. Sin embargo, el 2017 se fue con una mala noticia: Damián Musto habría dado positivo en un control antidoping cuando jugaba en Rosario Central y en Nuñez no lo contratarían.
El futbolista de 30 años juega actualmente en el Tijuana de México e iba a firmar con el Millonario por tres temporadas. Al enterarse de esta extraña situación, los dirigentes de River frenaron las negociaciones, al menos hasta no tener certezas de lo que pasó.
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Según trascendió, Musto habría dado positivo el 20 junio del 2017 en el partido entre Rosario Cental y Talleres de Córdoba. Y la sustancia sería un diurético. Sin embargo, el futbolista no fue notificado y desde su entorno aseguran que no consumió nada.
En principio, la ONAD (Organización Nacional Anti Dopaje) habría notificado a River sobre el doping, pero lo curioso es que se hace seis meses después de producirse y sin sanción de por medio.
La sustancia sería encontrada sería hidroclorotiazida, que funciona como diurético.