El dueño de la noche no fue Lionel Messi. Tampoco Neymar con sus firuletes. Ni siquiera el uruguayo Luis Suárez. El gran responsable del 3 a 0 de la Juventus al Barcelona fue el cordobés Paulo Dybala, que metió dos golazos y demostró que está para brillar los grandes partidos. Fue la ida por los cuartos de la Champions League.
El dato es contundente: Dybala metió goles en 11 partidos de esta temporada y Juventus ganó siempre. Nada de empates o derrotas. Con Paulo en cancha, la Vecchia Signora es casi imbatible. Y hoy lo demostró con un partido muy serio contra Barcelona, que hace unas semanas enloqueció a todos con su histórica remontada ante el PSG. Pero eso ya es pasado.
En 20 minutos, Juventus aprovechó las graves falencias defensivas de su rival y Dybala no falló. Dos zurdazos calcados, inatajables para el arquero Ter Stegen. Del otro lado casi no hubo reacción. Messi dejó cara a cara a Iniesta con Gigi Buffon, que se hizo enorme y tapó la clara chance de gol del Barcelona. Y poco más. Fue un verdadero monólogo del local.
En el complemento, los catalanes intentaron golpear de entrada pero chocaron con la defensa italiana. Hasta que el potente Giorgio Chiellini le ganó en el área a Javier Mascherano y, de cabeza, estampó el 3 a 0 final a los 9 minutos. En lo que quedó, hubo dos polémicas picantes: un claro penal no cobrado para el Barcelona y un gol lícito para la Juve que el juez de línea dio como offisde.
La vuelta se jugará el 19 de abril en el Camp Nou.
