Ariel Holan llegó a Independiente con la premisa de recuperar los viejos tiempos gloriosos. Hincha fanático del club de Avellaneda, el entrenador fue contratado por la dirigencia para que el equipo recupere ese fútbol vistoso de las épocas de Bochini, Bertoni y Marangoni.
El presente está un poco alejado de eso. Con más de 100 millones de pesos invertidos en delanteros, el equipo aún no logra hacer pie. Si bien falta tiempo de trabajo, las perspectivas para el comienzo del campeonato son sombrías. Un un partido amistoso que se disputó en el Libertadores de América, el equipo (con mayoría de titulares) cayó por 1-0 contra Chicago.
Lo más destacado del partido fueron la sociedad entre Walter Erviti y Ezequiel Barco que en varias oportunidades se juntaron y trataron de darle fútbol al equipo. La defensa sufrió mucho (no jugaron los centrales titulares) y los delanteros, Lucas Albertengo y Emanuel Giglioti, no pudieron convertir, pese a que tuvieron claras oportunidades.
El gol de Chicago llegó tras una pelota parada, algo que el entrenador no ha logrado corregir y donde Independiente tiene más dificultades.