Yaya Touré, figura del Manchester City, rechazó el año pasado, una oferta de 520.000 libras (600.000 euros) semanales del fútbol chino para seguir en club.
Touré, de 33 años, que termina contrato el próximo 30 de junio, recibió la propuesta del Jiangsu Suning durante el mercado de traspasos de enero de 2016, pero prefirió continuar en el City, entonces entrenado por Manuel Pellegrini y ahora dirigido por Pep Guardiola.
"Yaya quiere jugar al máximo nivel. Está contento en el Manchester City y prefiere el fútbol antes que el dinero", dijo su agente, Dimitri Seluk a la cadena británica Sky Sports.
La pujante Superliga China, que en las últimas semanas ha tanteado al delantero del Chelsea Diego Costa, se ha hecho en el presente mercado de fichajes con dos futbolistas que militaban en la Premier League: el brasileño Oscar y el nigeriano John Obi Mikel, ambos del Chelsea.
Sin embargo, la Federación China de Fútbol (CFA) aprobó en los últimos días, a falta de seis semanas para que arranque la liga, una nueva normativa por la cual se reduce de cuatro a tres el número de futbolistas extranjeros al mismo tiempo sobre el césped, lo que ha forzado a numerosos equipos a frenar el fichaje de jugadores extranjeros.
Esta normativa de la CFA permite alinear a tres futbolistas foráneos en cada equipo por partido y obliga a los clubes a formar de inicio con al menos un futbolista chino sub-23. Además, en la convocatoria de 18 sólo podrá haber cinco extranjeros y tendrá que haber, al menos, dos futbolistas sub-23.
