Pep Guardiola, acaso uno de los referentes más importantes del buen juego en el fútbol tiró un bombazo y terminó con la grieta (no la de Lanata) entre los que defienden el fútbol ofensivo y el fútbol defensivo. Esa discusión entre menotistas y bilardistas que en Argentina todavía no podemos superar.
A pocas horas del partido entre Manchester City y Barcelona por la Champions League sale a reflotar una frase suya publicada en el libro La Metamorfosis, de Martí Perarnau, que deja boquiabiertos a los fanaticos del buen fútbol. Esos que defienden a capa y espada el estilo de Cesar Luis Menotti, Angel Cappa y tantos otros. Sin pelos en la lengua, el técnico catalán disparó: "El tiki-taki es una mierda, es un sucedáneo: es pasarse el balón por pasárselo, sin intención ni agresividad".¡BOOM!
Guardiola explica que no hay un solo estilo para jugar al fútbol y declaró que "la táctica en Barcelona consistía en que le llegara el balón a Leo Messi". Sólo eso. Sin secretos. Pep sabía que tenía al mejor jugador del mundo y que si hacía bien las cosas (como que la pelota le llegue límpia) La Pulga iba a definir el partido. No por nada, juntos ganaron todo.
En una nota del diario Marca que firma el periodista Luis Rojo se explica que para Guardiola su etapa en el Barcelona fue fácil. Tenía jugadores que eran muy inteligentes y un distinto como Leo Messi. Sin embargo, el artículo remarca que en otros clubes como el Bayern Munich tuvo que usar un sinfín de sistemas obligado por los rivales y por un equipo muy diferente al azulgrana.
El artículo indica también que Guardiola "es un técnico abierto y dispuesto a aprender" ya que no se queda con un sólo sistema de juego. Dice por ejemplo, que en un partido utilizó "hasta dos o tres formaciones diferentes".
Seguramente la opinión de Guardiola no termine con la discusión que es más vieja que la rueda, pero de seguro llevará algo de claridad para pararse en el centro. Porque si algo aprendimos es que los extremos nunca fueron buenos.
