Ver a Lionel Messi otra vez entre los convocados del seleccionado argentino es una tranquilidad en medio de una lista polémica para jugar contra Brasil y Colombia en noviembre. El 10 es la cuota de esperanza para dos partidos clave en el camino a Rusia 2018. El resto es más de lo mismo, porque como ya dijimos el sábado pasado, el Patón Bauza cerró filas con este grupo de jugadores y apostó por blindar el vestuario y no romperlo con ausencias que hubieran hecho ruido entre los propios convocados.
Sin embargo, Bauza se metió solo en el lío. Y, como ya dijimos también la semana pasada, ahora corre el riesgo de tirarse en contra el humor de los futboleros argentinos. Contra Brasil y Colombia van a estar tan apuntados los jugadores históricos, muchos muy resistidos, como el DT. Y eso que recién empieza su ciclo.
Está muy claro que si Argentina gana será "por Messi" y si pierde será porque "muchos tienen un ciclo cumplido" y porque "el técnico sigue llamando siempre a los mismos". Es la más fácil pero tiene mucha lógica. Y Bauza se metió en ese problema. Esta vez el reclamo de la gente tiene mucho sentido común.
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Cuando muchos querían un recambio el seleccionador dejó afuera a uno solo de la vieja guardia: Marcos Rojo. Estaba suspendido para jugar con Brasil y en su club no juega. Después, inexplicablemente quedó afuera Matías Kranevitter que debiera ser una fija porque es el futuro de la Selección. Lo de Alario tampoco se entiende cuando hace unas semanas en declaraciones al diario Olé dijo que "aunque no juegue, Alario va a estar siempre".
De los más pedidos por los futboleros no llamó a ninguno. Toda Pasión propusp el hashtag #LosNombresdelRecambio y los más nombrados fueron Mauro Icardi, Fernando Belluschi y Gio Lo Celso. No está ninguno de los tres. Solo entraron Julio Buffarini y Marcos Acuña, dos que estaban en una segunda línea de los más mencionados. Y Gero Rulli por la lesión de Mariano Andújar.
La verdad que no llama la atención la insistencia de Bauza por jugadores como Di María y Agüero por lo explicado anteriormente. No rinden en la Selección pero los banca para no hacer ruido puertas adentro del vestuario. Y porque evidentemente confía en recuperarlos.
Se vienen Brasil y Colombia. Bauza apostó a tocar poco y nada. A esta Selección le falta un "refresh" para volver a entusiasmar a la gente y ganar algún gran partido. Después de varias finales perdidas y mucho desencanto, meter un triunfazo en Brasil sería un gran paso para volver a conquistar al público.
Menos mal que vuelve Messi. Menos mal...