Por Hernán Castillo.
Son muchas decepciones. Demasiadas. A este grupo de jugadores la suerte no los acompaña. Al menos en la Selección argentina. Y muchos ya están pensando en dar un paso al costado. Las generaciones futuras tiene hambre y no quieren perder lugar. No quieren que otros ocupen su lugar.
¿Habrá terminado un ciclo para Higuaín, Agüero y Di María? Ellos, junto a Mascherano y Messi son la columna vertebral de este equipo. Se puede sumar Chiquito Romero, pero el puesto de arquero parece no tener discusión.
Algunos ya se corrieron. O los corrieron. Demichelis, Zabaleta, Garay ya fueron reemplazados por Mercado, Otamendi y Funes Mori. Pero son todos defensores. ¿Será tiempo ahora de cambiar a los de adelante?
Gran responsabilidad tendrá el DT. Pero también los jugadores, que deberán reconocer que ya tuvieron sus oportunidades y que no las han sabido aprovechar. O por lo menos, no han cumplido con el objetivo mayor, que es el de llevarse un título.
¿Qué pasará con Messi? ¿Aguantará otro fracaso, acostumbrado a tantos éxitos? Sus lágrimas son genuinas y se sabe que ama jugar en la Selección argentina. Será sólo su decisión. Nadie puede atreverse a cuestionar su juego.
Para colmo, detrás de la derrota no hay dirigentes que apoyen. La AFA está destrozada por peleas mezquinas entre hombres sedientos de poder, que poco se acuerdan del fútbol.
Estamos a dos años de Rusia 2018. Y el futuro es bastante incierto.
