Se sentía el clima espeso en la previa. Lejos de la fiesta anticipada, los hinchas locales intuían que el partido iba a ser complicado. Desde muy temprano comenzaron a colmar el Mineirao, donde más de 57.700 hinchas fueron testigos de la primera escena dramática de la fase final del Mundial. Así llegaban:
Los fanáticos de Chile soñaban con un gran partido de su selección. Algunos seguidores de la Roja se animaban a predecir una victoria de su equipo antes del comienzo del partido.
Con los equipos en la cancha, la "torcida" comenzó a meter presión desde el himno. Como es ya un clásico en los partidos de Brasil, una vez que termina la versión acortada de la canción nacional brasileña, los hinchas siguen cantando a capela. Lo hicieron con fuerza:
Luego de eso, lo conocido: David Luiz marcaría luego de un tiro libre entrando por el segundo palo del arquero Bravo y algunos minutos después llegaría la igualdad de Chile a través de Alexis Sánchez, en una jugada en la que la Roja aprovechó un error en un lateral brasileño. Así las cosas, el clima comenzaba a espesarse en el estadio y los locales esperaban algo de su estrella. La primera ovación de la jornada fue para Neymar:
En el segundo tiempo Chile mejoró mucho, sobre todo en sus salidas defensivas. Así logró controlar mejor la pelota y pese a los ataques de un Brasil que intentaba sin mucha claridad, llevó el partido al alargue. Fue en el tiempo extra donde los chilenos tuvieron la más clara en los pies de Pinilla, que estrelló un tiro en el travesaño de Júlio César. El partido llegó a los penales, y después de errores en los dos equipos, llegaría el turno de Jara para la Roja. Su error, fue el desahogo para todo Brasil. Su fallo, fue el remedio más eficaz para ahuyentar todos los fantasmas que ya rodeaban el Mineirao y mantenían en tensión total a los "torcedores". Así se celebró el último penal de la serie:
Las bocinas no dejan de sonar en Belo Horizonte. Para Brasil es una fiesta: estuvieron al borde de otro fracaso histórico. Ahora es tiempo de festejar y para los brasileños de esperar que su equipo haya salido fortalecido de esta serie para comenzar un camino de mayor solidez en los tres juegos que quedan.