No hay lugar para vacilar. Gerardo Martino le hace frente a la salida del ex presidente Sandro Rosell, hombre que lo llevó al Barcelona. "Lo conozco de hace mucho tiempo y me hubiera gustado que acabáramos esto todos juntos", admitió.
El Tata cree que es momento de "dar respuesta desde el costado futbolístico y tratar de que el plantel siga bien de ánimos". Y continuó: "No es noticia linda de recibir recién pasada la mitad de temporada, pero he preferido centrarme en los entrenamientos de los jugadores". No lo duda: "Lo que los futbolistas y el cuerpo técnico podemos hacer para ayudar es que el equipo tenga un buen rendimiento”.
No me imagino un escenario en que estemos más exigidos. La necesidad de pequeños logros para llegar a los logros grandes noto que es la misma.
El DT argentino reconoció que tras el penúltimo entrenamiento antes de enfrentar al Málaga, notó a sus jugadores "apenados por la decisión pero muy enfocados en el lado futbolístico... es la mejor manera de salir adelante”.
Sobre su futuro: "Cuando uno llega a un club de esta naturaleza desea continuar, pero digo exactamente lo que dije: que nadie lo puede asegurar”. El nuevo presidente, Josep Maria Bartomeu, remarcó su confianza en Martino y su deseo de ampliar su contrato hasta 2016.
