La Supercopa de Europa tiene dueño: Bayern Munich, actual campeón de la Champions League, venció a Chelsea, que se coronó en la última Europa League. Batallaron sin descanso: mucho roce, disputas en la mitad de la cancha y puro desgaste físico. Fueron dignos guerreros en una verdadera final. Al final, fue 2 a 2, con victoria del conjunto de Guardiola desde los doce pasos.
El equipo de Mourinho gritó primero. El Niño Torres recibió un centro y no falló en el área. Bayern tomó la posesión, pero no fue suficiente para tratar de inquietar a su rival. En la segunda jugada del complemento apareció el mejor jugador de Europa la última temporada: Ribery. El francés hizo gala del premio obtenido ayer en Mónaco y sacó un disparo muy fuerte que significó el empate.
A partir del 1-1 se generó un partido de ida y vuelta, intenso. Los goles desperdiciados llevaron a ambos equipos al alargue. Un detalle no menor: los Blues se quedaron con diez hombres debido a la expulsión de Ramires por una dura entrada contra Gotze a pocos minutos del cierre reglamentario.
Hazard no tardó y puso nuevamente a su equipo en ventaja. El belga batió al arquero Neuer con un impacto rasante al primer palo. Y así no le quedó otra al conjunto germano que empujar para tratar de soñar con los penales. Lo peloteó y sobre el final, Javi Martínez marcó el 2-2. Partidazo. En la tanda de penales, Bayern ganó 5-4 y se quedó con el título.
PEP RÉCORD
Guardiola se convirtió en el primer entrenador en ganar tres Supercopas en la historia de la competición, superando a Carlo Ancelotti, Louis van Gaal, Alex Ferguson, Arrigo Sacchi y Raymond Goethals.
