Hoy, con las llamas del pebetero apagadas, es el primer día de las Olimpiadas, proceso de cuatro años que transcurre entre Juego Olímpico y Juego Olímpico. En ese tiempo, se recorrerán una y otra vez las más grandes hazañas de Londres 2012. Porque las hubo. Y de qué manera. Dos protagonistas tuvieron un papel más que trascendental: Usain Bolt y Michael Phelps. Historias doradas, historias de triunfos difíciles de olvidar.
-Usain Bolt, la leyenda
Rompió todos los récords de las distancias cortas del atletismo. Se burló de la historia que forjaron Jesse Owens, Carl Lewis y Ben Johnson. Los aplastó a todos. Se convirtió en un nuevo dios de la velocidad. Bolt consiguió por segunda vez consecutiva las medallas doradas en los 100, 200 y 4X100 metros. "Ya soy una leyenda", dijo tras conseguir las tres preseas. Sí, ya es leyenda.
-Phelps, indomable
El nadador estadounidense habla con números: en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, consiguió cuatro medallas doradas (nado combinado 4X100 metros, mariposa 100 metros, combinada individual 200 metros y relevo estilo libre 4X200) y dos plateadas (mariposa 200 metros y estilo libre 4X100). Con estas preseas, llegó a las 22 preseas y se convirtió en el máximo ganador de la historia.
-El Dream Team se lució y no falló
Imparables. La Selección de básquet de Estados Unidos estableció el nuevo récord de anotación en la historia de los Juegos Olímpicos, con 156 puntos, ante Nigeria. El equipo dirigido por Mike Krzyzewski ganó su decimocuarto oro en el baloncesto olímpico, tras superar a España en la final. Durant fue el máximo anotador del equipo, con 19,5 puntos por partido.
-Murray, el británico que se sacó la espina de Wimbledon
El 8 de julio de este año, el británico se convirtió en el primer tenista británico en alcanzar la final del tradicional torneo de Wimbledon desde que Bunny Austin, en 1932. Pero perdió ante Roger Federer. En los Juegos, Murray se quedó con la medalla dorada tras vencer al suizo. Fue su gran revancha.
-Crismanich, el correntino que sorprendió a todos
Cada Juego Olímpico hay un batacazo argentino. Un deportista con raíces amateurs lleno de dificultades que emerge en la elite mundial. Crismanich rompió con todos los paradigmas. El correntino, de 25 años, se quedó con la medalla dorada en la categoría de hasta 80 kilos. Una actuación brillante, que quedará en la historia del deporte argentino.
-Francia, el primero en repetir la hazaña
En handball masculino, Francia se convirtió en la primera selección en repetir la medalla dorada. Se trata de una generación de jugadores que marcó un antes y un después este deporte: en los últimos seis años, bajo la conducción de Claude Onestá, consiguió dos Mundiales (Croacia 2009 y Suecia 2011), dos Europeos (Suiza 2006 y Austria 2010) y las dos últimas citas olímpicas.
-Kiprotich, el ugandés inexperto que relegó a los favoritos keniatas
En maratón, todo estaba dado para que festejaran los expertos keniatas, Abel Kirui y Wilson Kipsang Kiprotich. El ugandés Stephen Kiprotich se quedó con una de las históricas pruebas de los Juegos Olímpicos, la maratón. Increíblemente, se trató de la cuarta ocasión que encaró una prueba con distancia de 42 kilómetros. El atleta, de 23 años, completó el circuito en 2 horas, 8 minutos y 1 segundo.
-México alargó la pesadilla de Brasil en los Juegos
Neymar, Marcelo, Damiao. Estaban todas las figuras brasileras para festejar en fútbol por primera vez en los Juegos Olímpicos. Pero México sorprendió a todos. Y se quedó con la medalla dorada, tras ganar en la final por 2 a 1. Le alargó la pesadilla a Brasil. Aunque no le sobró casi nada en el juego, fue un equipo práctico, con proyectos interesantes y un libreto bien estudiado.
-Im Dong-Hyun, el surcoreano que apuntó con el corazón el primer récord
El tirador de arco surcoreano, casi ciego, estableció el primer récord mundial de Londres, en una disciplina que exige darle a un blanco a 70 metros. Fue cuatro veces campeón del mundo y otras tantas de Asia y, por equipos, consiguió el bicampeonato olímpico (Atenas 2004 y Pekín 2008). En Londres, logró el tercer puesto en la prueba por equipos.
-Semenya, la sudafricana que rompió con los prejuicios
Le impidieron correr durante un año porque sus rasgos físicos eran masculinos y despertaba dudas. ¿Se trataba de un hombre o una mujer? Al final, tras varios estudio médidos, la sudafricana Caster Semenya participó en los 800 metros de los Juegos Olímpicos y consiguió la medalla plateada. Semenya tuvo su gran oportunidad de medirse con sus pares, lejos de los prejuicios y sin cuestionamientos, esos que tanto la persiguieron durante toda su carrera.
