Toda una pesadilla. San Lorenzo ganaba y hacía un buen partido, acorde a su necesidad. Como si fuera parte de su destino, cuando hizo todo bien, o por lo menos lo necesario para llevarse la victoria, sufrió por un fallo arbitral. Una increíble decisión de Diego Abal perjudicó al Ciclón y permitió a Colón, por medio de Garcé, poner el 1 a 1 definitivo que hizo explotar de bronca a la gente en el Nuevo Gasómetro.
El equipo de Madelón ganaba 1 a 0, con gol de Enzo Kalinski en el final del primer tiempo. Jugaba con uno más por expulsión del Bichi Fuertes, que pegó un infantil codazo y dejó al equipo con diez en el primer tiempo. Al Ciclón no le sobró nada, pero había hecho méritos para irse con la victoria.
Hasta el error de Abal, Colón se había mostrado como un equipo pálido, sin reacción. El tanto de Garcé, tras centro de Higuaón, le dio deshinibición al conjunto de Sensini, que hasta pudo ganarlo ante un equipo shockeado por haber recibido uno de los goles más insólitos de la historia.
