Lev Yashin es considerado como uno de los mejores arqueros de la historia del fútbol: la Araña Negra, figura icónica de su selección, se consolidó como el único en su puesto en quedarse con un Balón de Oro, en 1963. Sin embargo, las condiciones climáticas en la Unión Soviética, su país natal, lo llevaron a popularizar el uso de guantes, que le permitían contar con mayor sensibilidad en sus manos a la hora de proteger los tres palos. Por ello, se transformó en un pionero.
Lev Yashin: de recoger frutas a leyenda mundial
Yashin, quien nació en Moscú el 22 de octubre de 1929, fue descubierto por los ojeadores del club Spartak de su ciudad de la manera más insólita: el futuro futbolista trabajaba junto a su padre recogiendo los melones que debían transportar en un camión. Su papá empezó a añadirle más dificultad a su tarea cuando le arrojaba las frutas desde vehículos lejanos y provocaba el vuelo de su hijo, quien ya mostraba condiciones.
Sin embargo, sus inicios fueron custodiando los postes en otro deporte colectivo. A los 16 años, se erigió como arquero en el equipo de la fábrica de herramientas donde realizaba labores durante la Segunda Guerra Mundial, pero despuntó el vicio en hockey sobre hielo. Ya en 1949, el Dinamo de Moscú, un equipo que estaba íntimamente vinculado a la Policía y al Ministerio de Seguridad del gigante europeo, posó sus ojos en él y le permitió brillar en el fútbol.
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En 1953, la leyenda de Lev Yashin comenzó a construirse: en aquel año, conquistó su primer título con el conjunto de la capital, la Copa de la URSS. Doce meses después, debutó con el combinado nacional, donde llegó a acumular 78 compromisos internacionales. Sus prestaciones más recordadas se produjeron en la Copa del Mundo; jugó Suecia 1958 -llegó a cuartos-, Chile 1962 -cuartos-, Inglaterra 1966 -semis- y México 1970 -cuartos-. Ya en Suecia se calzó los famosos guantes.
Lev Yashin: el mejor de los Mundiales
De los doce encuentros disputados en la fase final de la cita máxima, el arquero soviético consiguió que no le convirtieran en cuatro ocasiones. En su primer Mundial, fue elegido como el mejor jugador de su equipo y su tarea frente a Brasil, que tenía en el frente de ataque a Garrincha y a Pelé, fue consagratoria. En 1963, en el marco de un duelo entre Inglaterra frente a Resto del Mundo, realizó una serie de atajadas sensacionales que le permitieron quedarse con el mote de “Araña Negra”.
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Ocurre que Yashin solía utilizar un atuendo completamente negro y sus características, que incluían un gran porte y agilidad, sorprendían a todos los espectadores. Al mismo tiempo, disputaba los partidos con una gorra de tela de color cobrizo. En diciembre, los expertos lo eligieron como el mejor de la temporada y le entregaron el merecido Balón de Oro.
Lev Yashin tiene el récord de mayor cantidad de partidos jugados en la Liga Soviética, con 326 -en 270 de ellos, no recibió goles-. Además, logró atajar más de 150 penales en toda su carrera como profesional. La FIFA, por otra parte, lo eligió como el mejor arquero en la historia de las Copas del Mundo; en 1999, se quedó con el premio al mejor futbolista ruso del siglo XX.
A su vez, el soviético levantó el trofeo de la Eurocopa 1960 con su selección y fue subcampeón en 1964. Ocho años antes, en Australia, el conglomerado de naciones obtuvo la presea dorada en los Juegos Olímpicos. A lo largo de sus 24 años como jugador -se retiró en 1971-, únicamente militó en el elenco moscovita. Su último juego, organizado por la entidad madre del fútbol, contó con la presencia de más de 100.000 espectadores y cracks como el propio Pelé, Eusébio y Franz Beckenbauer.
