El Ascenso del fútbol argentino es una usina de situaciones curiosas y este viernes se sumó a la lista un momento insólito: la detención de un jugador en pleno partido de la Primera C. Sucedió a los 92 minutos del encentro que Ituzaingó le ganó a Berazategui 2 a 1 en su estadio del oeste del Gran Buenos Aires.
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En medio de un clima caliente por el gol decisivo de Matías Campusano en los minutos finales, el banco de suplentes del equipo visitante reclamaba más tiempo de juego al árbitro sobre el límite del campo, lo que provocó la reacción de los plateístas de Ituizaingó.
Entonces se generó una fuerte discusión entre hinchas y jugadores, que fue más allá de la agresión verbal. Los futbolistas contestaron con el lanzamientos de objetos desde el banco e Ian Troilo fue soprendido en el momento que lanzaba una botella plástica con agua que impactó sobre el rostro de un hombre identificado con los colores del rival.
De inmediato, los policías que habían llegado hasta el lugar para controlar la situación se lo llevaron escoltado, mientras el partido se reanudaba para completar los minutos de adición.