Se vivió un insólito momento en el fútbol de Guatemala. En el encuentro de vuelta de los cuartos de final del Torneo Apertura, Municipal recibió a Antigua GFC. En el último minuto del tiempo extra, el entrenador argentino Sebastián Bini decidió reemplazar a su compatriota y arquero Alejandro Medina, que al salir del terreno de juego se enojó y hasta quiso iniciar una pelea.
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El local estaba ganando 2-0, pero a 20 minutos del final el conjunto visitante empató y llevó el partido al alargue. Allí se mantuvo el resultado hasta que en los últimos instantes el DT hizo el cambio del arquero: Medina, ex-Arsenal de Sarandí, había sido titular en toda la temporada, pero Bini decidió que Kenderson Navarro estuviera debajo de los tres palos en la tanda de penales.
Al salir, Medina se sacó los guantes y mostró su enojo al llegar al banco de los suplentes: no quiso saludar a un asistente del entrenador y, acto seguido, rompió dos sillas de plástico a los golpes.
Pero la cuestión no quedó ahí. Mientras se jugaban los últimos instantes el partido, Medina le recriminó el cambio al entrenador, que no se guardó nada y le respondió. El arquero tuvo que ser frenado por sus compañeros.
El cambio finalmente no funcionó ya que Navarro no atajó ningún remate y su equipo quedó eliminado frente a sus hinchas.
