Lionel Messi volvió de la mejor manera tras dos meses sin jugar por una lesión. El capitán argentino anotó dos goles y dio una asistencia en la victoria 3-1 del Inter Miami ante Philadelphia Union por la MLS. Su regreso no podría haber sido de la mejor manera.
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Messi, de 37 años, no jugaba desde la final de la Copa América con la Selección argentina (14 de julio) por una lesión en el tobillo derecho. Tras dejar atrás ese problema, regresó este sábado a las canchas a puro talento y luego de 62 días. No solo lo hizo de manera excelente, sino que completó todo el partido.
En la MLS no competía desde el 1º de junio pero su doblete del sábado lo volvió a meter en la pelea por el título de máximo goleador, con 14 tantos registrados en 13 partidos, además de 14 asistencias. Impresionante. Pero hubo un momento de la noche en el que se encendieron algunas alarmas.
Solo un susto: Messi recibió una patada muy dura
Porque a los 26 minutos del segundo tiempo Messi recibió una durísima patada de parte de Quinn Sullivan, quien intentó sin éxito robarle la pelota y lo terminó golpeando en el tobillo derecho, el mismo que se había lesionado en la final de la Copa América y que lo había dejado afuera de las canchas por dos meses.
El campeón del mundo quedó tendido sobre el campo de juego durante algunos segundos, mientras que el Tata Martino (ubicado muy cerca de donde ocurrió la falta) reclamaba tarjeta amarilla. Tarjeta que, al final, el juez del partido le sacó al entrenador rosarino por protestar.
Pero solo fue un susto porque Messi se recuperó sin problemas y completó todo el partido del Inter Miami, donde anotó dos goles y le dio una asistencia a Luis Suárez para la victoria por 3-1.
