River le ganó 1-0 a Talleres en el Monumental por la octava fecha de la Copa de la Liga y quedó como líder de la Zona A. Pero no todo fue alegría para el conjunto Millonario: al ser reemplazado, el mediocampista Ignacio Fernández tuvo un claro gesto de enojo.
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Sobre los 16 minutos del segundo tiempo, el entrenador Martín Demichelis dispuso el ingreso de Rodrigo Aliendro y la salida de Nacho. El ex-Atlético Mineiro no quedó para nada contento con esa decisión y lo expresó abiertamente.
Al llegar al banco, el mediocampista -que tuvo una situación muy clara al estrellar un remate en el palo- tiró una botella al piso con violencia. Así, dejó en claro que su intención era seguir en cancha algunos minutos más.
De todos modos, la molestia le duró poco a Nacho que, minutos después, cantó junto a sus compañeros desde el banco de suplentes. Al jugador se lo pudo ver entonando las estrofas con la hinchada.
