El dirigente Javier Cantero había logrado llegar a comandar los destinos de Independiente con la confianza de los hinchas: su perfil renovado, fuera de la rosca política y con una carrera humilde parecían ser la clave para que el Rojo lograra recuperar el rumbo. Sin embargo, el consultor quedó marcado como la cara visible del peor momento de la historia del elenco de Avellaneda.
Cantero, que nació el 30 de julio de 1957 en el partido bonaerense de Quilmes, se vio obligado a realizar diversos trabajos mientras cursaba sus estudios secundarios: entre varios oficios, supo ser kiosquero, vendedor en una librería, lavador de autos, cadete en una reconocida fábrica de arandelas y hasta pulidor. De todas formas, su periplo en el mundo laboral tomó cierta estabilidad cuando fue contratado como empleado en la famosa cervecería Palermo, ubicada en el barrio porteño del mismo nombre.
Javier Cantero: los inicios de un tapado en la política del Rojo
Luego de un breve paso por el centro de cómputos de una compañía dedicada al rubro textil, trabajó en el Servicio Nacional de Agua Potable durante 18 años. Allí, tomó el rol de delegado y hasta fundó una mutual de trabajadores; gracias a su labor, fue contratado por el prestigioso Banco Interamericano de Desarrollo (BID) como especialista en financiamiento de diversos proyectos de saneamiento.
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Casi a la par, el consultor empezó a construir las bases para hacer realidad su sueño: como hincha fanático de Independiente, buscaba ganar adeptos y crecer a nivel interno. En noviembre de 2007, fue uno de los principales impulsores de la modificación de la calle de entrada al estadio Libertadores de América, que pasó de llamarse Cordero a Ricardo Bochini, por el máximo ídolo de la historia de la institución. Pese a que Cantero no había conseguido el aval del club, llevó a cabo las gestiones en el Concejo Deliberante de Avellaneda.
Aquel proyecto acabaría por catapultarlo a las altas esferas de la institución. Debido a la conexión con gran parte de los socios y su figura outsider, decidió presentarse a las elecciones en 2011 bajo el sello de Independiente Místico; con el 59% de los votos, Javier Cantero se transformó en el nuevo mandatario del Rojo.
Javier Cantero: una gestión en caída libre
En el marco de una economía deficitaria heredada de la gestión de Julio Comparada y de una situación futbolística más que precaria, el consultor prometió avanzar con un proyecto austero. Aun así, la nueva administración tuvo como eje la lucha contra la barrabrava, con Pablo “Bebote” Álvarez como líder principal; una de las propuestas del incipiente gobierno fue suprimir la colaboración económica hacia aquellos grupos y promover el regreso de las familias a las canchas. Para ello, Cantero ideó la oficialización del derecho de admisión.
Los resultados, a la postre, fueron catastróficos: producto de la falta de recursos -y con nula gestión propia de los mismos-, el equipo de Avellaneda descendió por primera vez en su historia a la Primera B Nacional. El promedio de las temporadas 2010/11, 2011/12 y 2012/12 -esta última con el consultor como administrador de la institución- sentenció a Independiente.
Javier Cantero: renuncia y expulsión
Para colmo, las amenazas constantes por parte de las agrupaciones que ya habían ganado poder dentro del club derribaron cualquier esperanza de quitarlas del centro de la escena; la política de mano dura había tenido pocas virtudes. Las magras prestaciones del equipo en la segunda categoría, la crisis financiera y la presión de la oposición fueron los grandes detonantes para la posterior renuncia de Cantero a ocho meses del final de su período.
Claudio Keblaitis, quien se desempeñaba como vicepresidente segundo, tomó las riendas y llamó a elecciones anticipadas. Ya en 2014, Hugo Moyano triunfaría en los comicios por casi el 70% de los votos: el Rey de Copas lograría retornar a la Primera División.
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En 2019, el líder del sindicato de Camioneros decidió quitarle al consultor su condición de socio, así como también al exsecretario general Pedro Larralde y al extesorero Luis Felice. “Es una paradoja: una comisión integrada por Pablo Moyano, que está a punto de ir a juicio oral por presunta asociación ilícita, quiere echarme a mí”, sostuvo Cantero, quien retomó su rol como vicepresidente de HYTSA, una empresa que presta servicios profesionales a diferentes firmas estatales y privadas.
En su perfil de Linkedin, la red social de contactos profesionales y empresariales, Javier Cantero indica que ocupa el mismo cargo en la compañía desde febrero de 1997, es decir más de 25 años. HYTSA ofrece servicios de asesoramiento en temas como Medio Ambiente, Agua y Saneamiento, Hidráulica, Carreteras y Autopistas, Ferrocarriles, Fortalecimiento Institucional, Recursos Hídricos y Electricidad y Electromecánica.
