Daniel Passarella era el entrenador. Ese equipo Sub 23 reforzado con tres futbolistas mayores había llegado invicto a la final. En el Estadio Sanford de la Universidad de Georgia los favoritos eran esos muchachos de celeste y blanco, más allá del poderío de los africanos de Nigeria. Pero después de ir dos veces arriba en el marcador, un descuido en el minuto 90 le hizo perder el partido. Fue el 3 de agosto de 1996 cuando la Selección Argentina perdió una insólita final en los Juegos Olímpicos de Atlanta.
Aquel equipo se había clasificado a los Juegos en el Preolímpico que se había disputado en Mar del Plata. Tenía la base de la Selección absoluta ya que Passarella citaba a muchos futbolistas jóvenes que fueron parte de ese plantel sub 23 que contó con Roberto Sensini, José Chamot y Diego Simeone como los mayores que permitía el reglamento.
La final arrancó de gran manera para la Selección Argentina, ya que se puso arriba en el marcador muy rápido con un gol de Claudio Piojo López a los tres minutos de partido. Después de los primeros minutos, las Águilas Africanas se asentaron en el campo de juego y empezaron a tener jugadas claras para convertir. Producto de ello, a los 28 minutos ejecutaron un tiro de esquina, Pablo Cavallero quedó a mitad de camino y lo aprovechó Celestine Babayaro para empatar el duelo.
En ese momento, los argentinos recuperaron el control del juego y después de una falta adentro del área a Ariel Ortega, Hernán Crespo desde los once pasos anotó el segundo gol. No obstante, la historia cambiaría 16 minutos antes del final, ya que después de un largo saque lateral al área, los defensores argentinos se quedaron inmóviles y un nigeriano la peinó para que, después de un yerro de otro compañero, Daniel Amokachi convirtiera por encima de Cavallero para marcar el 2-2.
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Y cuando todo indicaba que irían al tiempo suplementario, llegó el error fatal. En un tiro libre desde la izquierda para Nigeria, desde el banco de suplentes llegó la orden para tirar el achique para provocar el offside de los jugadores africanos. Sin embargo, la coordinación no fue perfecta, Sensini quedó habilitando en la misma línea que Amunike, quien se encontró con la pelota en absoluta soledad y definió sin resistencia de Pablo Cavallero.
Era el último minuto, no había tiempo para reacción. Apenas las protestas al árbitro italiano Pierluigi Collina, quien confió en el juez de línea y convalidó el 3-2 que dejó a la Argentina sin el oro, conformándose con la medalla plateada.
El camino a la final de los Juegos Olímpicos de Atlanta 96
La Selección Argentina Sub-23 llegó a la final de los Juegos Olímpicos Atlanta 1996 contra Nigeria de manera invicta tras vencer a Estados Unidos y sendas igualdades contra Portugal y Túnez en la fase de grupos. En los cuartos de final goleó 4-0 a España y en semifinales venció 2-0 a Portugal para garantizarse una medalla.
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Por otro lado, Nigeria había vencido a Hungría y Japón, cayó contra Brasil en fase de grupos y en los choques de eliminación directa le ganó 2-0 a México y sacó a los brasileños por 4-3. Brasil, precisamente, debió conformarse con la medalla de bronce tras vencer 5-0 a Portugal.
El plantel que llevó Passarella a EE.UU.
- Arqueros: Pablo Cavallero y Carlos Bossio.
- Defensores: Roberto Ayala, Roberto Sensini, José Chamot, Javier Zanetti, Mauricio Pineda y Pablo Paz.
- Volantes: Matías Almeyda, Diego Simeone, Christian Bassedas, Hugo Morales, Marcelo Gallardo y Gustavo López.
- Delanteros: Claudio López, Hernán Crespo, Ariel Ortega y Marcelo Delgado.
- Los futbolistas mayores de 23 años en ese plantel eran Diego Simeone, Roberto Sensini y Claudio Chamot.
