Después de un año y nueve meses, comenzó el torneo de fútbol infantil de AFA y lo hizo con escándalo ya que los padres no pudieron ingresar a las diferentes canchas para acompañar a sus hijos menores de edad y tuvieron que ver los partidos desde afuera. Familias en las vías del tren y los techos de las casas fueron algunas de las escenas insólitas de este fin de semana.
En la semana, desde la AFA habían comunicado que no habría público en las categorías infantiles, pero los padres igualmente tuvieron que acompañar a sus hijos a competir ya que son todos menores. Esto se da en el marco de la pandemia de COVID-19, que continúa en descenso en la Argentina. El Ministerio de Salud informó este sábado 1451 nuevos contagios y 82 muertos por coronavirus. Según el reporte diario, ya son 5.238.610 los casos confirmados y 114.367 las víctimas fatales en la Argentina.
TN Deportivo recopiló muchas imágenes y quejas de los diferentes padres que tuvieron que ver los partidos de sus hijos a la intemperie y muchas veces en lugares peligrosos como el costado de la autopista, en unas terrazas o al borde de las vías del tren.
Esta decisión de la AFA se da en medio de la baja de casos en la Argentina de manera sostenida desde hace más de dos meses y mientras bares, boliches, teatros y otros lugares cerrados permiten el acceso de gente. El fútbol infantil de AFA se juega en lugares amplios y a cielo abierto.
Ya pasó más de un año y medio desde el último partido con público en partidos del fútbol argentino. La prueba piloto de Argentina-Bolivia en el estadio Monumental por las Eliminatorias para el Mundial de Qatar 2022 fue la excepción en medio del fastidio y enojo de los futboleros que ven como todas las actividades están abiertas, incluso en ámbitos cerrados, pero el fútbol sigue esperando.
¿Por qué todavía no volvieron los hinchas a las canchas? La pregunta no tiene una única respuesta, pero sí una certeza: al Gobierno y a los dirigentes de los clubes poco le importó la gente. Si bien anunciaron con reunirse para tratar de poner fecha y condiciones para permitir que los socios, que hace 18 meses pagan la cuota sin recibir nada a cambio, puedan dejar de ver los partidos por TV y puedan hacerlo en las tribunas, el tema se postergó.
Lo cierto es que la relación entre el gobierno nacional y la AFA no es buena. A Claudio Tapia no lo reciben. El último interlocutor para cerrar los detalles del protocolo de Argentina-Bolivia fue el doctor Donato Villani. Chiqui sabe que está apuntado desde Casa Rosada y ni siquiera quiere hacer ruido. Cuanto más desapercibido pase, mejor. Eso le jugó en contra al fútbol. Desde Viamonte no quisieron acelerar, hicieron la plancha. “Así están cómodos”, es el comentario que más se escucha.