Pocos conocían hasta hoy al checo Patrik Schick. Los seguidores del fútbol alemán sabían que el centrodelantero jugó la última temporada para el Bayern Leverkusen. A partir de ahora se hizo famoso por el golazo que metió ante Escocia en el debut de la República Checa en la Eurocopa. Pateó desde 49 metros y convirtió el gol de mayor distancia en toda la historia del torneo.
Schick aprovechó una jugada que salió rebotada desde el campo de su propio equipo y cuando cruzó la mitad de la cancha le pegó sin pararla. La pelota recorrió 49 metros y se metió por encima del arquero escocés Marshall, que terminó enroscado en la red del arco.
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El anterior gol de mayor larga distancia lo tenía el español Gordillo cuando convirtió ante Dinamarca desde 34 metros en la Eurocopa de 1988. Schick lo superó por mucho.
Evidentemente el delantero checo había visto adelantado a Marshall y se animó a pegarle sin haber parado la pelota. Sus compañeros corrieron a abrazarlo por tremenda joya. Fue el 2 a 0 del triunfo.
Cómo sigue Eriksen: su salud hoy
El mediocampista de Dinamarca Christian Eriksen, está “conmovido” por los numerosos mensajes de apoyo recibidos desde su paro cardíaco en pleno partido de la Eurocopa. El futbolista, a través de su agente, indicó que trabajará para saber qué fue lo que pasó y dejó en claro que no se rendirá. Los médicos decidieron que pese a su buena evolución, permanezca en observación por al menos un día más.
“La mitad del planeta se contactó con nosotros, todo el mundo se preocupó. Ahora sólo tiene que descansar. Con él están su mujer y sus padres. Seguirá en observación durante el día de hoy y quizás también el martes”, explicó Martin Schoots, en declaraciones a La Gazzetta dello Sport.
“Nosotros hablamos. Él bromeó, estaba de buen humor, lo encontré bien. Todos queremos entender lo que le pasó, él también; los médicos hacen pruebas con profundidad, eso llevará tiempo”, estimó el agente.
En la Gazzetta, su agente aseguró haber visto a Eriksen “feliz, porque se dio cuenta de todo el amor que le rodea, de los mensajes que llegaron de todo el mundo”.
“Quedó especialmente conmovido por las muestras de afecto del mundo del Inter; no sólo de sus compañeros, con los que habló en un chat, sino también de los fanáticos. Christian no se rinde, él y su familia da las gracias al mundo entero”, indicó Martin Schoots.