Alejandro “Papu” Gómez firmó contrato con Sevilla y, al despedirse de Atalanta aseguró sentirse “triste y contento” por tener que dejar el equipo de la Serie A de Italia en el que jugó durante seis temporadas, para afrontar el nuevo desafío.
“Estoy triste y contento. Es una mezcla de sentimientos, después de tantos años en esta ciudad”, declaró en diálogo con Sky Sport, antes de tomar el vuelo que lo depositará en su nueva ciudad.
El futbolista, de 32 años, quedó relegado en el equipo de Bérgamo por su mala relación con el entrenador del equipo, Gian Piero Gasperini, principal motivo por el que emigra al conjunto sevillano.
“A veces las cosas van en un cierto sentido, pero prefiero acordarme de lo que hice desde mi primer día en Bérgamo. Hemos hecho historia en este club”, continuó sobre el equipo al que llevó a jugar por primera vez en su historia los cuartos de final de la Liga de Campeones en la temporada 2019/20.
El jugador surgido de Arsenal de Sarandí, equipo con el que logró la Copa Sudamericana 2007 y la Copa Suruga Bank 2008, por último, habló sobre los hinchas del Atalanta, quienes lo consideran como uno de sus máximos ídolos.
“¿Los fanáticos? Los voy a extrañar. Bérgamo está en mi corazón. Nos volveremos a ver pronto seguramente”, cerró el Papu.
El argentino jugó 252 partidos en el club de Bérgamo y convirtió 59 goles entre la Liga italiana y las copas europeas.
Gómez llega al fútbol español luego de que el Sevilla desembolsara alrededor de nueve millones de euros. Allí, se sumará a sus compatriotas Lucas Ocampos, Marcos Acuña y Franco Vázquez.
Gasperini y una fría despedida
Gian Piero Gasperini, técnico del Atalanta y principal responsable de la salida del argentino del equipo de Bérgamo, conseguirá en el Sevilla “una buena vitrina” para seguir demostrando todo su potencial.
“Él (Gómez) dio muchísimo al Atalanta. Nos ayudó a crecer. Creo que ahora el equipo puede caminar también sin él y seguir creciendo. Solo puedo desearle lo mejor, se va a un equipo muy fuerte que juega la ‘Champions’”, dijo Gasperini en una entrevista a la televisión nacional italiana Rai.
Gómez deja al Atalanta tras seis temporadas y media en la que se convirtió en un ídolo de los hinchas y en el capitán del equipo, con el que marcó 59 goles y alcanzó una doble clasificación para la Liga de Campeones.
Sin embargo, un duro altercado con Gasperini en diciembre provocó una ruptura que lo dejó al margen del proyecto deportivo del técnico italiano.
Su último partido como el Atalanta se remonta al 16 de diciembre en la cancha de la Juventus. Desde entonces, no fue convocado en los últimos nueve partidos donde el club de Bérgamo registra seis victorias y tres empates.