Boca y River igualaron 2 a 2 el Superclásico que disputaron por la Copa Diego Maradona en un encuentro cargado de jugadas de peligro, polémicas y dos expulsiones clave que determinaron el rumbo del partido: la de Jorman Campuzano en Boca y la de Enzo Pérez en River.
El mediocampista colombiano vio la roja a los 12 minutos del complemento, cuando Boca vencía a River por la mínima, por un manotazo en la cara de Matías Suárez. La acción fue increíble porque ocurrió después del codazo que el mismo jugador le había dado en el primer tiempo a Jorge Carrascal por el que debió haber visto la roja pero apenas fue amonestado.
A partir de entonces Boca sufrió los embates de River, que logró dar vuelta el marcador en una ráfaga: a los 29 del complemento Federico Girotti estableció el empate parcial y a los 32 Rafael Borré marcó de cabeza el que parecía ser el triunfo Millonario.
Todo parecía dado para River pero una acción de Enzo Pérez sobre los 35 minutos del complemento le quitó opciones a los de Marcelo Gallardo. El mediocampista mendocino protagonizó una dura entrada sobre Nicolás Capaldo, vio la segunda amarilla y la subsiguiente expulsión.
Con 10 jugadores por lado, Boca se sintió capaz de ir por el empate y lo consiguió a los 41 minutos del segundo tiempo con una exquisita definición de Sebastián Villa tras una jugada magistral de Carlos Tevez.
Lo tuvo Boca, después River pero fue 2 a 2 en La Bombonera en un Superclásico digno de las mejores épocas. Ahora, ambos pensarán en el gran objetivo: sus partidos de ida de semifinales de la Copa Libertadores: para el Millonario el martes 5 ante Palmeiras en el estadio de Independiente; para el Xeneize el miércoles 6 ante Santos en La Boca.
