Facundo Campazzo marcó una huella en hinchas, dirigentes y compañeros de los lugares en donde desembarcó. Es inevitable y está en su ADN: es especial en lo humano y en lo basquetbolístico. Su profesionalismo estuvo a la orden del día en cada uno de los equipos en los que jugó.
Cuando Peñarol de Mar del Plata lo llevó a sus filas, sabía que era una gran oportunidad y que no debía desaprovechar bajo ningún punto de vista. Allí conquistó innumerables torneos, estuvo bajo el liderazgo de Leo Gutiérrez y la Oveja Hernández, también fue líder, aceptó todos los roles con el fin de que el equipo sacara provecho de él.
// NBA │Facundo Campazzo firmó contrato con Denver Nuggets: “Estoy ansioso y muy ilusionado”
Ganó cuatro ligas nacionales (2010/11, 12 y 2014) la Copa Argentina 2010, la Argentina Challenge 2010, el Súper 8 en tres ocasiones (2009, 2011, y 2013) y el Fiba Américas 2010. A nivel personal fue revelación en la Liga Nacional, MVP de la Copa Argentina, el más valioso en el Súper 8 y MVP finales Liga Nacional 2012 y 2014. Su salida a Europa se dio a lo grande.
La humildad lo caracterizó en cada circunstancia. Su perfil no cambió incluso cuando llegó a Europa. Allí, jugó en el Real Madrid, donde firmó 3 años de contrato (2014). Campazzo se desempeñó como tercer base del equipo blanco en un momento histórico: el Merengue ganó la triple corona.
En 2015, fue cedido a Murcia y entendió el momento. Sabía que estar en lo más alto se lograba siendo revolucionario. Así encaró su travesía en la UCAM y toda la ciudad lo empezó a querer. Su magia fue tal que los hinchas disfrutaron de su juego y él mismo reconoció en su carta de despedida que ese club ocupó un lugar central en su vida.
Su regreso al Real Madrid lo encontró más maduro, ya habituado al juego de la Liga Endesa y con hambre de ganar todo con la Casa Blanca. El base argentino sabía que para cumplir su tan anhelado sueño de llegar a la NBA, tenía que deslumbrar en esa escala previa llamada España.
No tuvo límites y conquistó en dos oportunidades la Euroliga, tres veces la Liga española y también levantó la Copa del Rey en dos temporadas.
Su mánager Claudio Villanueva resume al nuevo base de Denver Nuggets de la siguiente manera: “Acompaño el sueño de Facundo, porque es el especialista más grande que conozco en concretar sus fantasías en el juego y en la vida”. Gran definición para un argentino que la peleó en todos los frentes, aún cuando lo miraban de reojo por la altura.
Campazzo es un jugador que seguramente va a deslumbrar. “Suele luchar en defensa y desarrolló algunos trucos ingeniosos para compensar su tamaño, pero esos problemas serán mucho más preocupantes cuando llegue a la NBA”, dijo el periodista TJ Mc Bride del portal Mile High Sports.
¿Los grandes especialistas de la NBA habrán visto a Facu lo suficiente? ¿O se guió por alguna noche errónea del base argentino? Algo parecido ocurrió con Manu Ginóbili en su llegada a San Antonio Spurs: fue un tanto ignorado por un sector de la prensa. Ya sabemos cómo terminó esa historia.
Desde estas latitudes lo conocemos como el revolucionario. Equipo que pisó, equipo en el que dejó una huella indeleble. Creo que Denver no va a ser la excepción. Facu quiere cumplir su sueño NBA de la mejor forma.
“Fui muy feliz en España, pero ahora debo ir a cumplir mi sueño. Llevo una vida esperando este momento. Gracias por tanto”, fueron las palabras que usó Campazzo para despedirse del Madrid. Toda una declaración de principios.