En 2010, Mario Balotelli ganó el premio Golden Boy como uno de los jugadores con más futuro en el mundo del fútbol. Por aquel entonces, ya también deslumbraba un tal Lionel Messi, que finalmente terminó siendo uno de los futbolistas más determinantes de la nueva era. A diferencia de Leo, el italiano nunca logró encontrar un lugar para desarrollarse y madurar y tuvo una vida más cercana a los escándalos que a la pelota.
En este último tiempo, después de que el Brescia, equipo del que es hincha, lo echará, Súper Mario fue visto entrenando con el Franciacorta FC, un club de la Serie D, la cuarta división del fútbol italiano.
¿Cómo llegó ahí? Por qué, pese a sus cualidades, no logra estar en un equipo de categoría. Bolotelli tiene tan solo 30 años y su carrera parece acabada. Ningún club ni ningún técnico quieren darle una nueva oportunidad. Está olvidado.
En la última temporada con el Brescia, jugó 19 partidos y marcó cinco goles. La última vez que jugó al fútbol como profesional fue en marzo de este año. Ahora pelotea con futbolistas amateurs para mantenerse en forma y encontrar un poco el rumbo.
Balotelli puede presumir con un historial con el que muchos jugadores de su edad no podrían ni competir.
Con 18 años debutó en el Inter y una temporada después, la 2009-2010, ganó el triplete con José Mourinho. Allí compartió plantel con Diego Milito, Cambiasso y Eto’o. De allí fue al Manchester City, al Liverpool, al Milan, al Niza, al Marsella y al Brescia, en una clarísima cuesta abajo. Ganó la Liga italiana, la Premier League y la Champions, además de ser subcampeón con Italia en la Eurocopa 2012.
Sus cuestiones extrafutbolísticas siempre fueron portada de los diarios sensacionalistas y fueron en detrimento de su rendimiento dentro del campo de juego. Infidelidades, peleas, multas de tráfico y escándalos con mujeres, son parte de su prontuario.
Tantos admiradores como detractores tiene Balotelli en el mundo del fútbol. Por ejemplo, José Mourinho, aseguró que podría escribir un libro de 300 páginas sobre sus dos años en el Inter junto al delantero, pero que no sería una comedia y sí un drama. Algo similar podría relatar su DT en Manchester City, Roberto Mancini, que llegó a pelearse a golpes en un entrenamiento con el futbolista.
El último en criticarlo fue Massimo Cellino, presidente del Brescia, que lo terminó echando del club: “Mario vive mas allá de las reglas, o con normas que son solo suyas; le dices algo y él hace otra cosa”, expresó.
Lo cierto es que Balotelli aún tiene mucho por delante y si logra ser más profesional seguramente habrá varios equipos interesados en contratarlo. Nunca faltará oportunidad para un futbolista de su categoría.
