El budín de vino se convirtió en un clásico de la repostería argentina que durante las fiestas cobra especial protagonismo. Su suave textura, intenso aroma y sabor a vino tinto lo convierten en un postre irresistible.
Preparar un budín de vino casero es más sencillo de lo que se imagina. La receta es bastante accesible y no requiere de técnicas de repostería avanzadas. Con ingredientes básicos como harina, azúcar, huevos, vino tinto y cacao en polvo se puede elaborar un postre digno de cualquier restaurante. La combinación de estos elementos crea una armonía de sabores que deleitará a todos.
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Para preparar budín de vino es aconsejable seguir algunos tips. Se recomienda utilizar un vino tinto de sabor intenso según la preferencia personal. La mermelada de frutos rojos aporta un toque especial, aunque se puede usar cualquier sabor. El cacao amargo intensifica el sabor del budín. Y para decorar se sugiere espolvorear con azúcar impalpable o acompañar con una bola de helado.
Receta de budín de vino
Ingredientes:
- 2 huevos grandes
- 125 gramos de azúcar
- 125 gramos de aceite (puede ser girasol o maíz)
- 125 mililitros de vino tinto
- 100 gramos de mermelada de frutos rojos
- 225 gramos de harina 0000
- 30 gramos de cacao amargo en polvo
- 2 cucharaditas de polvo de hornear
- Un pizca de sal
Preparación:
- Precalentá el horno: A 180 grados, así el budín se cocina parejito.
- Engrasá el molde: Usá manteca y espolvoreá con harina para que el budín se despegue fácil.
- Mezclá los secos: En un bowl, tamizá la harina, el cacao y el polvo de hornear. Reservá.
- Batí los huevos: Con el azúcar hasta que quede una mezcla espumosa y blanquecina.
- Incorporá los húmedos: Agregá el aceite y la mermelada a la mezcla de huevos y azúcar. Batí bien.
- Uní todo: De a poco, incorporá los ingredientes secos a la mezcla húmeda. Mezclá hasta que no queden grumos.
- El toque final: Agregá el vino tinto y mezclá suavemente.
- Horneá: Verté la preparación en el molde enmantecado y llevá al horno por aproximadamente 45 minutos o hasta que al pincharlo con un palillo, este salga limpio.
- Dejá enfriar: Antes de desmoldar, dejá enfriar el budín por completo.
Cómo personalizar el budín de vino
La versatilidad del budín de vino permite una gran cantidad de personalizaciones. Además de los ingredientes básicos se pueden agregar frutos secos como nueces, almendras o pasas para aportar textura y sabor. Las especias como canela, nuez moscada o jengibre le darán un toque cálido y aromático. Si se busca un toque cítrico, ralladura de naranja o limón pueden ser una excelente opción. Para los amantes del chocolate, se puede aumentar la cantidad de cacao o agregar chips de chocolate.
Otra forma de personalizar el budín es variando la mermelada. En lugar de frutos rojos se puede utilizar mermelada de ciruela, damasco o incluso dulce de leche. También se puede combinar diferentes tipos de mermelada para crear sabores más complejos.
La elección del vino es fundamental. Un vino tinto con cuerpo y taninos marcados le dará un sabor más intenso al budín, mientras que un vino más ligero y frutal aportará un toque más delicado.
