Se eligieron a los mejores ejemplares de la raza Braford en la 135° Exposición Rural de Palermo y las máximas distinciones, en las categorías machos y hembras, fueron para cabañas de las provincias de Córdoba y Entre Ríos, respectivamente.
El Gran Campeón Macho fue para la cabaña La Dominga, situada en la localidad cordobesa de Ischilín. Su propietario, Alejandro Lauret, se mostró emocionado tras la consagración, a pesar de tener ya tres grandes campeones en Palermo y el gran campeón del mundial de la raza, que se consagró en Corrientes durante el año pasado.
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“La sensación es indescriptible. Pasa el tiempo y ayer mi mujer me decía ‘no cambiás más’. Pasamos por momentos muy difíciles por la sequía”, dijo Lauret tras la consagración, entre lágrimas.
“Siempre buscamos en lograr mejoras continuas, pero está muy difícil. Hay mucha competencia, la raza pasa por un momento increíble”, agregó.
La Dominga cuenta con un plantel de 90 hembras donantes y unos 250 a 300 animales, machos y hembras, en recría para la comercialización. Terminan unos 250 reproductores al año, entre 10% y 15% de toros, y el resto son hembras de diferentes categorías. Los ejemplares son comercializados en un remate anual y en forma directa.
“Se va a un centro de colecta. A disfrutarlo”, señaló sobre el destino del toro ganador.
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En tanto, el Reservado Gran Campeón Macho fue para el box 985, de la Cabaña Don Cancio y otros. Y el Tercer Mejor Macho se lo llevó el box 945, Cabaña La Trinidad, que debutaba en esta edición y cuyo propietario es Diego Eder.
Por su parte, la Gran Campeón Hembra de la raza Braford fue para el box 1052, de la cabaña La Matilde, situada en Macía, Entre Ríos, propiedad de Hector Felipe Martinez. La Reservada Gran Campeón Hembra fue para el box 1062, de Cabaña Mirunga y Don Cancio. Y el Tercer Mejor Hembra fue para el box 1025, de Cabaña La Pasión y Doble Zeta.
Las palabras del jurado
El jurado fue el destacado genetista Carlos Ojea Rullán, que distinguió a los mejores ejemplares y remarcó el buen momento de la raza.
Con respecto a los atributos de los grandes campeones, Ojea Rullán consideró que “la gran Campeona es muy completa, con un tren posterior y unos movimientos bárbaros. La Reservada también”.
Tras la jura, sostuvo: “Impresionado por el nivel, no sorprendido, porque ya Braford nos tiene acostumbrados. Tuve el honor de jurar el mundial el año pasado, tres veces las nacionales y dos veces Palermo y la raza va en permanente crecimiento”.
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Con respecto al Gran Campeón Macho, manifestó que “sintetiza lo que se busca en la raza”.
“Buen color, masculinidad, buen tren posterior, muy buenos movimientos y funcionalidad. Además de buena circunferencia escrotal y buen área de ojo de bife”, enumeró sobre las características del reproductor que se llevó la máxima cucarda.
Por último, señaló que la elección entre el Gran Campeón y Reservado Gran Campeón en machos fue muy parejo. “El Gran Campeón lo aventajaba un poquito en el arco de costilla y en la expresión de la cabeza. Son dos torazos. Me voy muy conforme”, finalizó.
