Uno de los errores más comunes al manejar en rutas argentinas es depender exclusivamente del modo automático de las luces del auto. Este sistema, aunque cómodo, puede no encender las luces en determinadas situaciones, como en autopistas durante el día.
En las rutas nacionales de Argentina, es obligatorio circular con las luces bajas encendidas, incluso con luz diurna: “Las luces bajas o diurnas permanecerán encendidas, tanto de día como de noche, independientemente del grado de luz natural, o de las condiciones de visibilidad que se registren, excepto cuando corresponda la alta y en cruces ferroviales”, indica la Ley de Tránsito en el artículo 47. Si el sistema automático no activa las luces, podrías recibir una multa.
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El problema con las luces automáticas radica en que no siempre detectan condiciones de luz ambiental que requieren el encendido de las luces. Por ejemplo, en días nublados o al atravesar túneles, es posible que el sensor del auto no active las luces. En estas circunstancias, circular sin tenerlas encendidas puede generar multas por parte de las autoridades viales, ya que la visibilidad del vehículo disminuye.
A pesar de que muchas provincias ya implementaron normas que permiten el uso de luces diurnas (DRL), hay algunas jurisdicciones en Argentina que no lo aceptan. En esos lugares, es obligatorio usar las luces bajas en todo momento, independientemente de la hora del día o la visibilidad. No cumplir con esta normativa, aun cuando las luces automáticas estén activadas, puede llevar a sanciones.
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Las recomendaciones para usar las luces en la ruta
- Prender luces de forma manual: en rutas y autopistas, especialmente durante el día, enciende manualmente las luces bajas aunque el sistema automático no lo haga. Es obligatorio en muchas jurisdicciones argentinas y ayuda a aumentar la visibilidad.
- Verificar las condiciones climáticas: si manejás en condiciones de baja visibilidad (niebla, lluvia, túneles), no confíes solo en las luces automáticas. Activá las luces bajas manualmente para garantizar tu seguridad y la de otros conductores.
- Revisar el estado del sensor: si tu vehículo cuenta con luces automáticas, verificá regularmente que los sensores funcionan bien. Si están sucios o dañados, podrían no activar las luces cuando sea necesario.
- Usar las luces antiniebla cuando sea necesario: si la visibilidad es muy baja, complementá las luces bajas con las antiniebla, pero apágalas cuando la visibilidad mejore para no deslumbrar a otros conductores.
- Mantené las luces siempre limpias: asegurate de que las luces estén limpias y en buen estado. Las luces sucias o dañadas reducen su efectividad, tanto en modo automático como manual, lo que afecta tu visibilidad y la de otros vehículos en la ruta.
