Un estudio le puso fin a una eterna discusión entre los fanáticos de los autos eléctricos y los nafteros: cuál de los dos es más costoso de reparar luego de un siniestro vial. Según la firma norteamericana Mitchell, los primeros son alrededor de un 20 por ciento más caros.
Este relevamiento puso el foco en el mercado norteamericano y revela que la gravedad de estas reclamaciones de vehículos eléctricos en el segundo trimestre de 2024 fue por un valor promedio de 5.753 dólares (5.147 euros) en Estados Unidos y de 6.534 dólares canadienses (4.326 euros) en Canadá.
Por el contrario, los costos de reparación de vehículos con motor de combustión fueron, de media, un 20 por ciento más bajos en Estados Unidos (4.806 dólares/4.300 euros) y un 31 por ciento menos en Canadá (4.958 dólares canadienses/3.283 euros).
En cuanto a modelos concretos, el dúo formado por el Tesla Model 3 y el Tesla Model Y encabezan la lista en cuanto a frecuencia de solicitudes de reparación a las aseguradoras en ambos países, representando más de la mitad de todos los casos. No es un dato muy llamativo si se tiene en cuenta que ambos son los autos eléctricos más vendidos del mundo.
Un dato curioso que se extrae del estudio de Mitchell es la frecuencia de siniestralidad total, ya que es similar tanto en vehículos eléctricos como de combustión. Con tasas del 9,45 por ciento y del 9,16 por ciento, respectivamente, esta siniestralidad pareja se debe a la creciente complejidad de los vehículos modernos, que hace que su reparación sea cada vez más difícil y costosa, lo que ha aumentado el número de casos en los que las compañías aseguradoras declaran siniestro total.
Por último, el informe también revela que los coches eléctricos requieren, de media, más horas de trabajo mecánico que un vehículo con motor térmico. Sin embargo, en el caso de los primeros es menos probable que necesiten reparaciones de chasis en comparación con sus equivalentes con motor de combustión. Esto sugiere que la integridad estructural de los vehículos eléctricos podría ser mayor que la de los térmicos, probablemente al integrar la batería como parte del chasis, aunque es algo que no se ha contrastado de momento.