Si los autos eléctricos acabarán finalmente con los combustibles líquidos (nafta, diésel, etanol, etc.) es una discusión que, en la actualidad, está más caliente que nunca. Y una startup alemana se metió en la discusión con una tecnología que, hasta ayer, parecía imposible de fabricar.
La firma alemana presentó un sistema de motores eléctricos integrados en la rueda del vehículo que prometen ser más chicos y livianos, por tanto, más eficientes y económicos. Se llama DeepDrive y está participada por BMW y Continental, entre otras empresas.
Se trata de un avanzado motor de rueda que prescinde de tierras raras, tiene hasta un 80 por ciento menos de metales ferrosos y un 50 por ciento menos de imanes, lo que se traduce en un menos coste de desarrollo, hasta un 20 por ciento menos.
Las ventajas del motor de rueda
Desde la compañía explican que esta tecnología tiene varias ventajas. Entre ellas, liberar espacio al prescindir de componentes de transmisión y, por tanto, dejar más espacio para ofrecer baterías más grandes.
Por otra parte, estos motores utilizan imanes más delgados que los que emplean otras marcas como Tesla, lo que consigue reducir el peso (60 kg frente a los más de 100 kg de alternativas similares) y los costos, y su estator está construido en segmentos que se apilan juntos, lo que genera menos recortes. Además, su fabricación es más sencilla, requiere menos pasos y, por tanto, abarata todavía más los costos.
Leé también: El problema que Elon Musk todavía no pudo resolver en Tesla
“Los motores eléctricos desarrollados por DeepDrive amplían la autonomía de los vehículos eléctricos. Son más ligeros, más económicos y más eficientes en el uso de los recursos. Combinar todo eso con nuestra eficiente tecnología de frenos de alto rendimiento para producir una unidad nueva y compacta es una contribución decisiva al éxito de la movilidad eléctrica. Lo que va unido, aquí crece unido”, afirma Matthias Matic, responsable del área de negocio de Seguridad y Movimiento de Continental.
El motor de rueda, según la startup alemana, permite recorrer una distancia de más de 800 kilómetros en un coche eléctrico medio y un ahorro al fabricante de unos 1.000 millones de euros en el desarrollo de un motor eléctrico.
Por último, pero no menos importante, gracias al motor de flujo radial de doble rotor, que acciona directamente la rueda, este motor de rueda permite prescindir de una gran cantidad de piezas que, además, tienen desgaste, como el diferencial, el embrague o el árbol de transmisión.
La única desventaja, por lo pronto, es que este sistema no podría aplicarse a autos deportivos. Concretamente, la versión de alto voltaje de 400-800 voltios que integra el inversor produce una potencia de hasta 150 kW (204 CV) y 1.500 Nm de par, con un peso de 32 kg y una eficiencia del 96,6 por ciento.
¿Llegará a los autos de serie?
DeepDrive asegura que está trabajando con diez fabricantes y espera alcanzar el primer acuerdo de suministro en 2025 para iniciar la producción en 2026. Por el momento, la marca que mostró un mayor interés en el motor de rueda fue BMW, que firmó un acuerdo de colaboración el año pasado para su desarrollo.