El Jeep Compass es el SUV mediano más vendido del país, y en su última actualización se puso al día con mejoras de equipamiento y mecánicas. Llega importado desde Brasil y en esta ocasión nos subimos para probar su flamante motor naftero turbo.
El Compass compite en el segmento de Toyota Corolla Cross, Honda CR-V, Volkswagen Taos, Ford Territory, Renault Koleos, Chevrolet Equinox, Citroën C5 Aircross y Peugeot 3008, entre otros modelos. Un segmento que cada vez tiene más participantes.
La gran novedad está debajo del capot -en las versiones Sport, Longitude, Longitud Plus y Limited-, que vienen con un motor naftero 1.3 litros turbo de 175 caballos de potencia a 5.750 rpm y 270 Nm de torque máximo a 1.850 rpm. Igual que en la nueva Toro, se combina con una caja automática de seis velocidades y con tracción delantera.
Si bien las opciones nafteras no están disponibles 4x4, incluyen un sistema llamado Jeep Traction Control que actúa en condiciones de baja adherencia para brindarle mayor capacidad de tracción. El sistema aplica el par de frenado a la rueda que patina y transfiere, a través del diferencial, el par a la otra rueda que está en contacto con el suelo. Para activar la función, el conductor sólo tiene que pulsar la tecla ASR OFF.
También hay diferencias estéticas en relación a su antecesor, con modificaciones que se notan principalmente en el sector frontal, con retoques en la parrilla, el conjunto óptico y el paragolpes. También en el diseño de las llantas de aleación.
En el interior la propuesta es un poco más arriesgada, fruto de una pantalla táctil de 10,1 pulgadas posicionada por encima de la consola central, lo que le otorga un efecto tipo flotante. Su nuevo sistema multimedia se llama Adventure Intelligence y se puede conectar con WiFi a bordo y 4G. Al menos en Brasil, cuenta con integración con el sistema Amazon Alexa de inteligencia artificial.
Además, el domingo a las 14:30 hs te vamos a contar el debate que se armó por el nuevo diseño del Mercedes-AMG SL, un clásico alemán que en su última generación luce una imagen muy diferente de la que esperaban los fanáticos.
Se trata de un deportivo descapotable que continua con la saga de los SL, pero que esta vez solo se venderá bajo la versión AMG, es decir, la más deportiva.
Con motor V8 4,0 litros de hasta 585 caballos de fuerza y caja automática de nueve marchas, ofrece prestaciones de primer nivel y todo el lujo y equipamiento que se espera de un auto de su categoría. Además, más adelante sumará una variante híbrida.
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