Algunos concesionarios de autos podrían cerrar sus puertas fruto de la crisis económica causada por el coronavirus, pandemia que se cobró la vida de más de 160 personas (cifra de muertes al cierre de esta nota), según estimaciones de las terminales locales.
"El impacto económico hará que algún concesionario se quede en el camino", lamentó el director general de Fiat-Chrysler Automobiles en la Argentina, Martín Zuppi, en una conferencia de prensa virtual de la que participó TN Autos.
Zuppi aclaró que el potencial cierre de concesionarios "no será generado por las terminales, sino por el mismo contexto". Esto significa que no formará parte de un plan programado, sino que sería por los efectos del bajo volumen de ventas.
La situación de los concesionarios es crítica: de soñar con un mercado de 1.000.000 de ventas en 2018, año que finalmente cerró en 803.000, pasaron a 459.000 unidades en 2019 (crisis económica mediante) y a proyectar un volumen -con viento a favor- de 250.000 unidades.
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Si el mercado automotor cerrara 2020 efectivamente con entre 200.000 y 250.000 patentamientos, se convertiría en el peor año para el sector desde 2003, cuando se concretaron apenas 143.273 ventas.
Un dato curioso: la proyección de venta de 0 km de Chile para 2020 es de 242.000 autos. Si la Argentina llegara a vender menos (está dentro de las posibilidades, según las previsiones), se convertiría en el tercer mercado de la región, luego de muchos años en el segundo lugar, detrás de Brasil.
Tal es la desesperación de los concesionarios por superar esta crisis que a través de Acara, la entidad que los agrupa, pidieron al Gobierno de la Nación que el Estado se haga cargo del pago total de los salarios de sus empleados por tres meses.
En concreto, los representantes del sector consideraron que "lo justo sería que el Estado se hiciera cargo de los sueldos privados por estos próximos tres meses".
