La de los GTI es una historia aparte. Pero si esa sigla -todo una señal de deportividad- tiene un padre es el Volkswagen Golf. Y por eso sobre una unidad de la séptima generación es que un preparador alemán "metió mano" para agregarle mucho picante.
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Se trata del Golf GTI TCR retocado por la empresa ABT. Lo primero que hicieron fue trabajar con su diseño exterior, con unas llantas exclusivas de 20 pulgadas (de serie viene con 18" o 19"), neumáticos de perfil bajo y una suspensión rebajada, ideal para devorar kilómetros en la pista.
Lo mejor, sin duda, es el motor. Que se mantiene con el cuatro cilindros 2.0 turbo pero de los 290 CV originales de esta versión (que ya es más potente que el convencional), se extendió hasta los 335 caballos de fuerza. El torque máximo también se incrementó hasta los 430 Nm.
Así, logra acelerar de 0 a 100 km/h en 5,4 segundos y alcanza una velocidad máxima de 265 km/h, cuando el original está el limitado electrónicamente a 250 km/h.
El Golf GTI TCR sobre el que realizaron esta preparación es una edición limitada inspirada en la competición, y de la cual se fabricaron nada más que 290 unidades.
Además de la mayor potencia se agregaron detalles que le dan un look más picante, como los zócalos, las llantas negras, el difusor posterior y las dos salidas de escape cromadas.
