En Shangai, China, un Tesla Model S terminó en el agua después de visitar una estación de carga para alimentar sus baterías (es eléctrico). El conductor aseguró que el auto se aceleró solo.
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Afortunadamente no hubo víctimas. En la imagen se ve a la pareja que viajaba en el auto arriba del techo, sacando fotos. Una vez en el río pudieron salir rápidamente del habitáculo. La información la publicó el medio X Auto.
Xiao Chen, como se llama el conductor, le aseguró a la prensa local que perdió el control porque el auto se aceleró repentinamente. Luego, golpeó una valla de protección y terminó en el río.
En 2016 el propio Elon Musk aseguró -ver tuit abajo- que el Tesla Model S puede flotar e incluso usarse como un "bote" por períodos breves de tiempo. Aunque, claro, también aclaró que no lo recomienda en absoluto.
La investigación ya está en marcha, y con la evaluación de la "caja negra" del auto se estima podrá saber qué fue realmente lo que pasó.
En el video de más abajo, subido a Twitter por la cuenta JayinShanghai, se ve cuando empiezan con el trabajo para quitar al vehículo del agua. Lo que no se sabe todavía es en qué estado quedó, y hasta qué punto el agua afectó a las baterías.
