El segmento de las pick ups "deportivas" está de moda en todo el mundo. No por casualidad Toyota acaba de presentar la Hilux GR Sport (tiene ajustes para una mejor performance en terrenos off-road) y Volkswagen lanzará este año en el país su Amarok de 258 caballos.
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Lo que nunca imaginaríamos es que a alguien se le ocurriría convertir en pick up a uno de los deportivos americanos más espectaculares: el Dodge Charger, un ícono entre los muscle car concebidos en Detroit, la cuna de este tipo de vehículos.
El "culpable" o encargado (no sabemos cómo deberíamos llamarlo) de realizar esta conversión fue el preparador Smyth Kit Cars, que ahora lo vende a 15.500 dólares. Por el amor que existe en el mercado estadounidense hacia las pick ups y los deportivos, y también por lo curioso que resulta, es un hecho que conseguirá dueño rápido.
La unidad es un Charger R/T fabricado en 2008. Corresponde a la sexta generación. Por eso lleva bajo su capot un poderoso motor naftero Hemi V8 de 5.7 litros y 340 caballos. Ningún componente de la mecánica original fue retocado por este preparador.
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En donde sí trabajo fue en la construcción de la caja de carga, que es de aluminio y mide seis pies (es 1,82 metros aproximadamente). Su capacidad de carga útil máxima es de 900 libras, o sea 408 kilos.
Por otra parte, le agregó un juego de llantas de aleación Hellcat de 20 pulgadas tonalizadas en negro que tienen 9 pulgadas de ancho al frente y 10 pulgadas atrás. También va dos centímetros más pegado al piso que el Charger R/T original gracias a un kit de carrocería personalizado y lleva dos pequeños alerones, uno delantero y otro trasero.
