Luego de un primer intento fallido con rotura de la transmisión, Volkswagen pudo finalmente superar el récord de 335 km/h de velocidad en el Salar de Bonneville con un Vento súper enfierrado. Llegó a 210 millas por hora, el equivalente a 338 km/h. ¡Dale play al video!
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Para conseguir este récord, Volkswagen tomó una unidad de nueva generación (acaba de llegar al país) y la convirtió por completo, con el motor naftero 2.0 litros turbo como base. Tiene varios caballos más que la versión "de calle" (220 CV): alrededor de 600 CV.
El auto recibió un tratamiento de competición. Fue rebajado, las suspensiones ajustadas para la exigencia extrema y los neumáticos cambiados, junto con unas llantas especiales para el salar.
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También se trabajó particularmente en el diferencial, para lograr que la capacidad de tracción sea óptima teniendo en cuenta que serán las ruedas delanteras las encargadas de transmitir la potencia del motor.
