El primer Aston Martin al que se subió el espía más famoso del mundo, James Bond, forma parte de la muestra Rétromobile de París, una exposición que reúne a varios de los mejores autos clásicos del mundo. Y a este, ¡hasta lo manejó Sean Connery!
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El DB5 luce todos los accesorios vistos en las pelis y aseguran que funcionan perfectamente. Incluye lanzamisiles ocultos en los faros traseros, una metralleta delantera y el "pincharuedas" que sale de las llantas. Se lo puede ver en clásicos como Goldfinger (1964) y Thunderball (1965). Un detalle genial: tiene patentes intercambiables de Francia, Inglaterra y Suiza.
Según informó a EFE el organizador de la muestra, Eric Le Moine, se trata de la misma unidad utilizada durante el rodaje. También tiene como equipamiento asientos eyectables, una pantalla de localización satelital y teléfono. En la década del '60, todo un adelanto futurista.
Eso sí, este ejemplar del DB5 sacrificó el baúl, ya que lo ocupan por completo los mecanismos para que todos esos accesorios funcionen. Lejos de la electrónica, para accionarlos desde el interior tuvieron que diseñar un sistema hidráulico de bombas de aceite.
En la muestra parisina los visitantes pueden conocer otros 14 vehículos que aparecieron en las películas de 007. Pertenecen a coleccionistas de todo el mundo.
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